martes, 20 de marzo de 2012

Tutti frutti de un melón

Te conocí siendo una semilla, tu eras una naranja siempre presente, con frío, calor lluvia o tempestad. Ahí, con tu color, con tu descaro, te me ofreciste, en Marzo.
Melocotón te idealicé, suave, calmante de mi sed, apetitoso, dulce y también naranja, aunque en ocasiones tu color se volvía potente, un rojo salvaje.
Pero ahora eres ambas cosas eres rojo salvaje, deseo, verde energía, positivo, verde semilla. Eres manzana, constante, no eres nueva, pero mordible eres. El misterio te rodea, el corazón escondes como las demás, cosas buenas cosas malas, cosas que has aprendido, cosas que quieres olvidar.
Desnúdate, olvídate de esa piel fina, o dejatela puesta, pero déjate coger, que no te morderé fuerte, tu olor me enloquece, tu tacto me sugiere.

No hay comentarios:

Publicar un comentario