miércoles, 19 de junio de 2013

Torpeza.

Con brutal sinceridad voy a explicar la historia. Aunque puede que no haya nada que contar, porque como dijiste no hay nada que debamos tener, aunque si querías tenerme en aquella cama. Siempre te echo de menos. Siempre pienso que la cagamos ambos. O puede que tan sólo yo, porque al fin y al cabo, la que se dejaba el tintero en cada estúpida carta fui yo. He estado ahogándome ahí abajo, no te dije nada. Tampoco pensé que te importará. Las cicatrices son por ti en su mayoría. Matame ya con el jodido último beso que no te atreviste a darme. Olvidemoslo. Tan sólo es piel por una noche lo que buscas, quizás sólo alguien por quien arriesgar de verdad que no te conozca tanto. Ya me aparto ya, no te voy a buscar más pero me llevo los recuerdos, porque los necesito como necesito la primera persona que conocí en ti.

No hay comentarios:

Publicar un comentario